viernes, 15 de marzo de 2013

DRAPETOMANÍA: EXPOSICIÓN HOMENAJE A GRUPO ANTILLANO


Esta exposición rinde homenaje a Grupo Antillano, un movimiento cultural y artístico que entre 1978 y 1983 propuso una visión de la cultura cubana que resaltaba la importancia de los elementos africanos y afro-caribeños en la formación de la nación cubana. En respuesta a los que en los años setenta presentaban la Santería y otras prácticas religiosas y culturales afrocubanas como primitivas y retrógradas, Grupo Antillano destacó valientemente la centralidad de las culturas africanas en cualquier caracterización de la cultura nacional. Para los artistas de Grupo Antillano, África y el Caribe circundante no eran influencias muertas o inertes, sino influencias vitales que continuaban definiendo el ser cubano.

El arte de Grupo Antillano forma parte de una larga tradición caribeña de resistencia y afirmación cultural, de creación de espacios e identidades propios. Es un ejemplo magnífico de ese “prodigioso esfuerzo de legítima defensa” y de “cimarroneria ideológica” que, al decir de René Depestre, permitió a las masas esclavizadas del hemisferio reelaborar sus pasados y culturas.

A mediados del siglo XIX, un médico de esclavos en el sur plantacionista americano, describió una enfermad privativa de esclavos: la drapetomanía. Del griego drapetes (escapar, huir) y manía (locura), el síntoma más visible de esta curiosa enfermedad era la tendencia irrefrenable y patológica de muchos esclavos a huir y a ser libres. Es decir, el galeno describió el cimarronaje como un padecimiento, una enfermedad, una desviación del orden natural, una expresión del indómito salvajismo de los negros.

Es sólo gracias a la creatividad y el ingenio de numerosos intelectuales y artistas caribeños--como los que participan en esta exposición--que hemos logrado transformar la aberración decimonónica en un gesto fundacional. Es gracias al trabajo de pensadores y artistas como los vinculados a Grupo Antillano que hoy podemos celebrar una cubanidad cimarrona y caribeña. Lo que el galeno describió como des/orden se ha convertido en piedra angular de un nuevo orden, de una utopía de espacios e identidades compartidos. Afortunadamente, como dijera el gran poeta martiniqueño Édouard Glissant, “el antiguo cimarronaje de los esclavos... opera nuevamente para nosotros.” Afortunadamente tenemos esa historia, nuestra historia, la historia que Grupo Antillano se ha empeñado en reconstruir y contar.

Curaduría: Alejandro de la Fuente

Un proyecto de la Fundación Caguayo
Patrocinio:
Fundación Ford; Fundación Caguayo;
Universidad de Pittsburgh,
Centro de Estudios Latinoamericanos

Paralelamente a la exposición se publica el libro Grupo Antillano: The Art of Afro-Cuba / El Arte de Afrocuba.

No hay comentarios:

El Destierro de Calibán, por Iván de la Nuez

    El Destierro de Calibán Iván de la Nuez 1996 I «Los cubanos harían bien en ser afrancesados .» Así habló Sartre. Fu...